Advirtió Digesa

Agua de piscinas caseras debe cambiarse diariamente

Son fuente de cultivo para infecciones y el zancudo del dengue

El agua de las piscinas caseras o de barrio debe ser cambiada diariamente o como máximo cada dos días, pues son un caldo de cultivo para las infecciones y la trasmisión de enfermedades, advirtió la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa) del Ministerio de Salud.

"Estas piscinas tienen que ser de uso exclusivo de los niños y no compartidas con adultos, pues podrían contagiarse de diversas enfermedades, como diarreas, infecciones dérmicas, urinarias, hasta enfermedades como hepatitis o de trasmisión sexual", señalaron especialistas de la DIGESA.

"El agua, al no recircular, se convierte además en un criadero para las larvas del dengue, por ello es importante renovarla constantemente", señalaron.

La Autoridad Sanitaria advirtió a los padres de familia y a los adultos encargados del cuidado de los niños estar al tanto de estos peligros y anteponer la salud de los pequeños. Se recordó que al igual que en las piscinas públicas los niños deben mantener la misma higiene. Es decir, ingresar con el cuerpo limpio y usar los servicios higiénicos cada vez que sea necesario.

Protección de los rayos UV

En otro momento se recordó, que aunque estas piscinas estén ubicadas en el patio de la casa o en la calle, los niños y adultos deben protegerse con bloqueadores solares con protección UV. "Los rayos ultravioletas son peligrosos y dañan la piel tanto en la playa, en las piscinas públicas, como en la calle". Por ello recomendó que los niños no estén expuestos al sol entre las 12 y 16 horas.

Lima, 23 de enero 2014